En este post vamos a ver más en detalle qué es más rentable si alquilar tu propiedad o venderla.
Rentabilidades de vender una propiedad vs alquilar
En este caso, la rentabilidad que podrías obtener comprando, reformando y vendiendo este piso sería de aproximadamente un 20%. Por otro lado, si lo alquilas, la rentabilidad anual sería de aproximadamente un 5%. Esto significa que venderlo te genera una rentabilidad cuatro veces mayor, lo que te permite buscar nuevas oportunidades de inversión.
Evidentemente, no todo se reduce a números. También es importante considerar otros factores. Algunas personas prefieren la seguridad de alquilar, ya que el proceso de buscar un nuevo inmueble puede ser tedioso y demandar mucho tiempo. Esto es particularmente cierto para patrimonios que ya cuentan con un capital importante. En estos casos, es común rentabilizar el capital a largo plazo, dejando que el inmueble genere ingresos pasivos constantes.
Si bien un 5% de rentabilidad anual puede parecer bajo para algunos inversores, para otros es suficiente. En mi caso, casi siempre opto por comprar, reformar y vender, porque esto me permite multiplicar mi capital y seguir creciendo mi patrimonio.
Dos estrategias distintas
Siempre abogo por la estrategia de comprar, reformar y vender porque es la más efectiva para generar patrimonio y aumentar tu capital. Sin embargo, si tuviera que aconsejar a alguien que ya posee varios inmuebles, le diría que se quede con los mejores.
Las propiedades de calidad suelen ofrecer rentas más bajas, pero también son más seguras. Por lo tanto, si buscas generar patrimonio rápidamente, compra para vender. Si prefieres estabilidad en tu patrimonio, mantén los inmuebles de mejor calidad.
Si optas por comprar, reformar y vender, busca una rentabilidad mínima del 25% en un plazo máximo de 18 meses. En este caso, no es tan crucial que el inmueble esté en la mejor zona, sino que tenga un buen margen de beneficio. Sin embargo, para quienes buscan un patrimonio a largo plazo, es importante quedarse con los mejores inmuebles, aquellos que no te den problemas y que estén en zonas con alta demanda.
Mi consejo es que, si estás pensando en comprar para alquilar, busca propiedades que ofrezcan estabilidad a largo plazo. Esto asegurará que, cuando llegues a una edad avanzada, sigas teniendo ingresos constantes y un patrimonio sólido.
Aquellas personas que tienen alquilado uno o más pisos, es decir, personas que son propietarias de un inmueble, ya sea pagando una hipoteca o teniendo la propiedad completamente pagada, y que lo alquilan a otras personas que les pagan una renta. Esto aplica tanto si es un piso, un local, un parking, o cualquier otro activo inmobiliario.
Analiza el tipo de propiedad que tienes
Existen propiedades que pueden costar un millón de euros o más, con tamaños que alcanzan los 300 metros cuadrados. Son caros, pero suelen ser más escasos y, a largo plazo, son más valiosos. Por lo tanto, si decides vender, vende las propiedades que no sean tan buenas.
Es cierto que las propiedades en áreas menos cotizadas pueden ofrecer una mayor rentabilidad a corto plazo, pero si buscas estabilidad en tu patrimonio, opta por mantener los inmuebles de calidad en buenos barrios. Este enfoque asegura que tu patrimonio sea más sólido y menos susceptible a fluctuaciones del mercado.
Ejemplo práctico: ¿Estás maximizando tu rentabilidad?
Vamos a poner un ejemplo sencillo. Imagina que tienes un piso que te costó en su momento 100.000 euros. Esto incluye la compra, la reforma, los honorarios del notario, impuestos, etc. Ahora digamos que lo compraste en el año 2014 y lo tienes alquilado, obteniendo una renta mensual de 600 euros.
En términos anuales, esto equivale a unos 6.000 euros de ingresos por alquiler. Esto representa una rentabilidad del 6% sobre el valor original de 100.000 euros, lo cual no está mal. Ahora imagina que te enteras de que tu vecino, que tiene un piso similar en la misma planta, ha vendido su propiedad por 150.000 euros.
Esto significa que tu piso ya no vale 100.000 euros, sino que se ha revalorizado, probablemente acercándose a los 150.000 euros. Ahora, si calculamos la rentabilidad sobre este nuevo valor, 6.000 euros anuales sobre 150.000 euros, obtenemos una rentabilidad del 4%.
¿Qué hacer en esta situación?
La clave aquí es que, si bien estás ganando lo mismo en términos de renta mensual, ahora tienes más dinero invertido en este inmueble, lo que reduce tu rentabilidad. Mi consejo es que siempre evalúes la rentabilidad real de tus activos, tanto en términos de rentas como del valor actual del inmueble.
Si este 4% de rentabilidad no te parece suficiente, quizás sea el momento de considerar vender. Al hacerlo, no solo habrás ganado por los alquileres mes a mes, sino también por la plusvalía generada.
Reflexiones finales
Es importante que todas las personas que tienen un piso, o cualquier tipo de propiedad en alquiler, vean este vídeo y consideren estos puntos. No se trata solo de mantener un inmueble por años y años, sino de saber cuándo es el momento adecuado para vender y maximizar tus beneficios.
Además, recuerda que los precios de los inmuebles tienden a subir a lo largo del tiempo, muchas veces impulsados por la inflación. Sin embargo, también existen altibajos en los precios, por lo que es fundamental aprovechar esas oscilaciones para vender y obtener beneficios.
Economista e inversor inmobiliario.
Más de 100 millones de euros invertidos en inmuebles y 800 operaciones inmobiliarias a sus espaldas.
Fundador de Inversor PRO y CEO de Monest Capital.